Recuerdan las películas y series de TV en donde aparecen los llamados “muertos vivientes” que tratan de comerse a los humanos y los persiguen hasta el fin, parecen que no solo son cuestión de ciencia ficción, ya que años atrás se ha descubierto que los zombis realmente existen, aunque con ciertas variantes que son resultado de un proceso conocido como Zombificación.
¿Qué es la Zombificación?
La zombificación es un proceso que lleva a cabo un Bokor, los cuales son brujos vudús haitianos, para tener el control y voluntad de una persona a través de ciertas hierbas y polvos, generalmente para convertirlos en sus esclavos o para deshacerse de ellos por algún encargo.
La mayoría de los casos que se han escuchado sobre personas zombis proviene de lugares donde su población es de escasos recursos y la creencia por cosas sobrenaturales esta a la orden del día. Tal es el caso de Haití, en donde se reportaron testimonios de gente que fue dada por muerta y tiempo después, sus parientes los vieron caminando por las calles.
Orígenes de la Zombificación
Esto surge de bastantes años atrás, cuando los europeos conquistaron y dominaron territorios africanos, para posteriormente llevarlos como esclavos a diferentes continentes. Una vez que se hizo el cruce de castas, llegó al Caribe la practica del Vudú, pero como no estaba permitido, tuvieron que hacer la combinación del cristianismo con el vuduismo.
Proceso de la Zombificación
Para que una persona se convierta en zombi, el bokor tiene que preparar y administrarle una sustancia conocida como polvo de zombi o coup de poudre, la cual está hecha de tetrodotoxina que es una neurotoxina mortal y generalmente es extraído del pez globo. Su función es disminuir todos los signos vitales ya que interfiere en la conductividad neuromuscular.
Una vez que da el aspecto de estar muerta la persona (por que realmente se administra una dosis que permita que la persona entre en un estado cataléptico), sus familiares realizan los ritos fúnebres y es enterrado en una fosa.
Es ahí cuando el bokor espera unos días para desenterrar a la victima y revivirla a través de otros polvos alucinógenos, elaborados con antropina y escopolomina que son capaces de anular su voluntad y dejar sus cualidades mentales en su más bajo nivel. A partir de ese momento, el zombi no puede hablar y no recordara algo de su vida pasada.
Evidencia de un zombi verdadero
El caso más famoso fue de un hombre haitiano llamado Clairvius Narcisee, que aseguraba haber sido víctima del proceso de zombificación durante dos años para trabajar como esclavo en una plantación.
Su historia de terror comienza un 2 de mayo de 1962 cuando fue declarado muerto y días después desenterrado por un bokor para administrarle una pasta de Datura. Durante dos años su amo, junto con otros zombis, los obligaba a trabajar arduamente en unas plantaciones de azúcar hasta que el brujo fue asesinado en 1964; por lo que al no recibir las dosis regulares de su alucinógeno, fue recobrando poco a poco la memoria.
Finalmente, en 1980 Clarivius Narcisee fue encontrado semidesnudo vagando solo en un estado de shock a las afueras de su aldea, por lo que fue hospitalizado para su recuperación; sin embargo, los alucinógenos ya le habían causado gran daño cerebral.
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